Comienza un nuevo año y es tiempo de buenos propósitos. Buenos propósitos que este año, más que nunca, tienen especial importancia. Y es que a pesar de todo lo que sucede en nuestro entorno, a pesar de la situación económica, de la situación política, social y global; a pesar de todos esos nubarrones que se ciernen sobre nosotros, seguimos siendo responsables en un altísimo porcentaje de lo que nos acontece.
Muchas personas atraviesan hoy por una crisis de identidad que les conduce directamente a un nuevo estado lleno de dudas y confusión. Sea cual sea la situación en la que te encuentres, te invito a que no te rindas y que afrontes la situación como un reto, como una oportunidad.
Muchos místicos, en su camino para encontrarse con Dios, se han referido a un período de confusión, tristeza, miedo y soledad al que han denominado “la noche oscura del alma”. Te recomiendo la lectura del libro del Dr. Mario Alonso Puigtitulado “Reinventarse” en el que, entre otros, habla de este estado de hundimiento en el que el ser humano se siente perdido y le cuesta pensar con claridad, en que la ansiedad, el miedo o la desesperanza hacen su aparición. Es una especie de llamada al conformismo y a la resignación que nos conducen a creer que la transformación personal es imposible.
Es en esta situación donde se hace imprescindible tomar conciencia de la situación por la que estamos atravesando y poner todo de nuestra parte para experimentar una mayor energía y vitalidad, cuidando las cuatro dimensiones del ser humano: física, mental, social y espiritual. Algunos consejos:
- Cuida tu postura corporal. Hombros caídos, espalda encogida, pecho retraído, caras tristes, tono de voz apagado y demás, son leídos por el cerebro como una derrota. Nuestro cuerpo habla por nosotros. Haz que luzca el entusiasmo, la pasión, la vitalidad.
- Duerme al menos 7 horas diarias.
- Haz ejercicio al menos 5 días a la semana durante media hora.
- Practica la meditación durante al menos diez minutos un par de veces al día. Para empezar será suficiente con que cierres los ojos y centres toda tu atención en la respiración.
- Comparte tus inquietudes con tus amigos, con tu familia y con la gente que te aprecia.
- Valora lo que te está sucediendo como una oportunidad.
- Toma conciencia de lo que te dices y busca todo lo extraordinario y lo bueno que tiene esta situación y cómo puedes colaborar aún más en tu proceso de transformación.
Conferencia Inaugural Curso de Desarrollo y Gestión del Cambio Presidida por el Embajador de España en Andorra |
Quiero dedicar este artículo a Borja Álvarez a quien tuve la suerte de conocer en Andorra durante el curso sobre desarrollo y gestión del cambio en la educación que tuve la suerte de impartir y al que Borja asistía como miembro de la Consejería de Educación de la Embajada de España en Andorra. ¡Gracias Borja!, por animarme a seguir publicando post en el blog.
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